Aunque Jennifer Lopez no competía en ninguna de las categorías, terminó siendo una de las protagonistas de la gala de los American Music Awards, celebrada en el Microsoft Theatre de Los Ángeles de California.
No hay ocasión que la Diva del Bronx acuda a un evento, pose en una alfombra roja o sea captada por los paparazzis y no sea centro de las miradas y noticia; y esta vez no ha sido menos.
Primero por su interpretación de su sencillo «On My Way», incluido en la banda sonora de la película «Marry me», que protagoniza con Maluma y Owen Wilson.
Y segundo, por el espectacular atuendo que escogió para brillar en el escenario: un sexy vestido de novia de su firma de cabecera: Dolce & Gabbana.
La favorecedora prenda color crema, con la que Jennifer Lopez volvió a demostrar que está más radiante y juvenil que nunca a sus ya cumplidos 52 años. estaba formada por un un top tipo corset con una voluminosa falda de tul.
Al más puro estilo Carrie Bradshaw, incluido el detalle de las botas con tacón y cordones y el fascinator que lució en parte de su actuación, Jennifer Lopez presumió de espectacular figura y de ser la modelo idónea para cualquier atuendo y ocasión.
Que Jennifer Lopez es icono de moda y marca tendencias con cada estilismo es un hecho innegable y título que revalida con cada nueva aparición.
Dolce & Gabbana se ha convertido, además, en firma de cabecera de sus últimas asistencias a importantes eventos que capta la esencia de diva de JLO.
El blanco, por su parte, es una de sus elecciones de acierto, como demostró cuando deslumbró recientemente en Las Vegas con un vestido de escotazo en la espalda o meses antes en Venecia, cuando La Mostra de cine.
